RESUMEN: Todo inicia una noche cualquiera con cinco típicos amigos saliendo de una típica fiesta, pero estos chicos sufren un desafortunado accidente y chocan con un camión a gran velocidad. El padre de uno de estos chicos que era el reverendo del pueblo, prohíbe los bailes y fiestas en este pequeño pueblo.
Luego de tres años llega a este pueblo que no puede bailar, el protagonista de la película, Ren MacCormack (Kenny Wormald), un chico de ciudad con costumbres diferentes; hace amigos y conoce a la hermosa hija del reverendo Ariel y a sus hermosos ojos azules, interpretada por Julianne Hough.
Como todo cliché "hoollywoodense" ;) la hermosa hija del reverendo no es una "santa" y es la novia del chico más malo del pueblo. Luego de un par de coquetos entre Ariel y Ren, este se entera que el pueblo esta lleno de leyes en contra del baile y el divertimento de los adolescentes.
Entre las aventuras de Ren y Ariel, se enciende la chispa del "amor"; luego Ariel deja a su maloso novio por el bailarín de Ren y... digamos que Ariel no termina muy bien luego que rompiera con su novio; después de esto Ariel y Ren se dan un tierno beso al atardecer.
A Ren se le atribuye el apelativo del chico rebelde del pueblo, luego este pelea por los derechos de los adolescentes a bailar de la forma que ellos quieran y cuando quieran, e inclusive se le ve a Ren citar textos bíblicos en pro de la danza. Tras negarse a la apelación de Ren, por la ley que prohíbe el baile; deciden hacer el baile de promoción en otro sitio y pide permiso al reverendo para que pueda llevar como pareja a su linda hija, Ariel.
En la conversación de Ren y el reverendo (Dennis Quaid), este toca su corazón y le dice que si no le da permiso a su hija él tampoco ira a la fiesta de promoción. En la misa, al día siguiente, el reverendo da su bendición a los chicos para que hagan su fiesta y... hacen su tan esperada fiesta de promoción, todos bailando Footloose.
CC: Me ahorrare palabras solo diré que... si viste la película original con Kevin Bacon es casi igual. ;)
Odio los clichés, más que odio creo que es cansancio; pero muy aparte de los clichés típicos, es una película con mucha fluidez no llegas a cansarte, sobre todo por los momentos graciosos que se encuentran muy bien organizados. Tiene una esencia joven diferente a las que he visto, y sí... debo admitirlo me hizo reír con algunas ocurrencias, sobretodo cuando Ren le enseña a su amigo a bailar. ;)
Pese a todo es una película con un alma juvenil y muy divertida de ver... le doy un... "7" ;)
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